A José Uriel Aréchiga Viramonte

 

Huberto Juárez Núñez*

Conocimos a Uriel Aréchiga, parte de esa generación de mexicanos que intentaron por primera vez en el país la nacionalización del marxismo-leninismo, es decir, superar la fase de la interpretación dogmática-religiosa promovida por los intereses de la burocracia soviética y asumida en México, sin más, por las direcciones del PCM.

Me cuesta ya recordarlo, porque fueron escasas, dos o tres ocasiones, las que pudimos conversar con dos íconos padres de esa generación, José Revueltas y el poeta Efraín Huerta. Pero a pesar de ello,fueron eventos suficientes para marcarnos y acabar de convencernos que la apuesta por una nueva forma de pensar y la de hacer las cosas diferentes, eran posibles.Inmediatamente, detrás de ellos, estuvieron Enrique González Rojo, Oscar Oliva, Jaime Labastida y Uriel Aréchiga Viramontes, estos últimos, más vinculados a nuestra formación, más cercanos a nuestro nuevos quehaceres. De los tres, el que se quedó permanentemente, con quien establecimos estrechos lazos de camaradería, de colaboración y de amistad fue Uriel, y desde entonces con él, y a su diestra, nuestro entrañable Ricardo.

Los años de la militancia, los años del estudio sistemático, los años del aprendizaje y de nuestras primeras acciones con el movimiento obrero, se vieron siempre acompañados con la sabiduría, la inteligencia y la originalidad que José Uriel destilaba en esa forma de ser que tiene, sin acartonamientos, pero con mucha erudición y siempre el buen humor a flor de piel.

A principio de los años 80, desde el trabajo docente encontramos muy pronto espacios para aprovechar la experiencia y los conocimientos de Uriel en este campo. Fueron trascendentes sus participaciones en el Seminario de El Capital que dirigió para profesores en la facultad de economía de la BUAP, y digo trascendentes, pues en aquellos años ya enfrentamos la ofensiva neo-ortodoxa (Friedman, Hayek, Laffer) que ponían en buen sepulcro la obra de Marx. En nuestra Facultad, hasta la fecha, conservamos cuatro cursos de Economía Política y existe un Doctorado con esa orientación.

Una década después ya estuvimos en condiciones de invitarlo a los proyectos que recién creábamos desde la universidad. El apoyo a las luchas de los trabajadores de la industria de autopartes y de las maquilas del vestido, la participación en la edición de boletines de investigación, los proyectos para construir interlocutores sindicales en la industria del automóvil.

Estuvimos juntos en el intento de consolidar el primer sindicato independiente de trabajadores de la maquila en México (Kukdong, 2000- 2003), acompañamos en más de una ocasión a los sindicalistas de la planta VW de México y a los sindicatos independientes del sector de autopartes.

El proyecto más importante fue su participación en la Red Internacional de Investigación del Trabajo en la Industria Automotriz, un colectivo inédito, formado por investigadores de universidades canadienses (MacMaster University, Queen University, York University), norteamericanas (Wayne State University, Michigan University, Ohio University, Illinois University, Harvard University, etc.) y mexicanas (BUAP, UAM, UNAM,UIA,UAEM), pero digo inédito porque el proyecto también incluía la participación de sindicalistas de las más importantes plantas automotrices en el país: VW, Ford, Chrysler, GM, Nissan Cuernavaca, Nissan Aguascalientes. Tenemos testimonios de la participación de Uriel en este campo. Con él hicimos el primer Bench Marking sindical de la industria, fue parte del equipo de trabajo de investigación que participó en las conferencias de IRNAA en Detroit y MacMaster presentando los resultados.

...Uriel es un camarada y un amigo en la extensión más amplia y singular del término. Es cierto, nuestros compromisos, nuestros trabajos, la distancia, no nos permiten tiempo de convivencia que nos gustaría compartir, digamos: nuestras afinidades por la música (Mendelssohn, Brahms, Bach!, Villalobos, Silvestre Revueltas!), algunos poetas (Whitman, Pound), cierta literatura como la novela negra (Hammett, Chandler) y muy particular, el gusto por la comida elaborada en familia, por supuesto, escanciada adecuadamente por alguno de nuestros tragos preferidos.

Puebla, 22 de enero de 2013 *Con motivo del reconocimiento a Uriel Aréchiga Viramontes por parte de la Universidad Autónoma Metropolitana. Lo recuperamos ante la publicación de Capital Depredador y Rebelión, El Zenzontle,2019, A dos años del adiós de Uriel.

Hernán Lavín Cerda. (Chile).

 

 

Muy de noche, entre los grillos.

Alguien nos dice como del otro lado:

no explotéis a los débiles,

dejad vivir en paz a las atormentadas viudas,

que nadie despoje a los huérfanos

PARA LA LIBERTAD SANGRÓ, LUCHÓ, PERO VIVIÓ PARA LA LIBERTAD

que se rompan las cadenas de los oprimidos

y que haya justicia entre los hombres.

COMO UN ÁRBOL CARNAL

aquí van los esposos

de nuestras hambrientas viudas

hacia la noche de aquella tierra que un día

fue de humildes

aquellos que hoy son carne de yugo

CUANTO PENAR PARA MORIRSE…

Permítenos, Miguel, que del barro

resucitemos tú alma:

los justos de corazón,

los bienaventurados de espíritu.

Aquí todos creemos en la vida sin clases

que ha de venir

porque hoy la muerte es el status del tirano

y nace del infame vicio de la propiedad privada

como dice San Benito.

Hagamos que al fin reine la igualdad

y los corintios ya lo saben

porque en un principio

alguien se los decía desde la misma orilla

y ahora también lo sientes los huérfanos

y los niños y las viudas

y tenemos fe que ellos ya vienen

y la niña que ayer tuvo 12 años

los espera con los brazos abiertos

para las bodas de la Liberación

y la Primera Cena.

 

Poema a Miguel Enríquez, dirigente del MIR chileno, luego de su muerte combatiendo a la dictadura en octubre de 1974.

Ernesto Aréchiga

En 1979 nuestro papá nos convocó a hablar con él sobre un tema muy serio. Nos extrañó un poco porque había cierta solemnidad en esa convocatoria. Se trataba de un tema crucial que me parece nos cambió la vida. Uriel expuso en primer lugar algo que sabíamos, que llevaba años y años de trabajar en la industria privada, principalmente en H-24 y en Química Lucava, ambas industrias propiedad de un español de nombre Luis Cano. Después de tanto tiempo las cosas habían cambiado radicalmente, la empresa había sido vendida, absorbida por una compañía gringa que había traído sus propios gerentes y administradores, que no estaba interesada en desarrollar tecnología con los recursos humanos locales sino que requería de simples operadores y aplicadores. Más allá de eso, estaba en marcha un proyecto más interesante, más prometedor, más acorde a sus intereses e inquietudes, un proyecto en el cual había participado desde el principio para proponer un plan de estudios y la organización de un equipo de profesores investigadores en ingeniería química. En resumen, quería dejar la industria privada para venirse a trabajar a la UAM y quería conocer nuestra opinión para tomar la decisión.

Los inconvenientes venían por el lado económico: ganaría mucho menos, fin de muchas prestaciones, fin de ciertos privilegios que se derivaban de participar en la empresa privada y en especial de trabajar con aquel patrón que con todo y que era un señor burgués tenía ciertas consideraciones hacia nosotros. Química Lucava estaba en un corredor industrial del municipio de Tultitlán. Apestaba por el malatión que producían en la planta, pero aun así parecía el mundo civilizado en comparación a lo que era Iztapalapa en aquellos años de reciente fundación de la UAM. Ninguno de sus tres hijos dijo que no. De ese modo, Uriel se vio en libertad plena de renunciar a la compañía y de venir a trabajar a la UAM Iztapalapa adonde trabajó hasta el final de su vida. En Química Lucava se quedó un proyecto muy importante para él, sobre el cual lo escuchamos hablar montones de veces, aquel sueño de organizar un equipo de ingenieros capaces de desarrollar tecnología propia, acorde a las necesidades de este país, no atada a los intereses extranjeros y que eventualmente constituyera un ejemplo a seguir en el camino hacia nuestra liberación tecnológica y la construcción de un país no dependiente en términos de ciencia y tecnología, por lo tanto más libre.

En la UAM desarrolló ese proyecto por otras vías, en el ámbito de sus propias investigaciones, como el trabajo con los alfareros, pero especialmente en la formación de los y las estudiantes que seguramente aprendieron de él esta visión de las cosas. Los muchos otros quehaceres que desarrolló en otros ámbitos dentro de la UAM, en la UNAM, en el seminario del Capital de la Facultad de Economía, en la redacción de periódicos de combate como el Zenzontle o en la experiencia educativa de Tas Polbé en tierrras zapatistas, aunque de muy diversa naturaleza, me parece comparten ese ideario suyo relacionado con la necesidad de construir una patria libre de ataduras de todo tipo. Libre de la dependencia tecnológica que tanto nos daña, libre de las imposiciones del capital transnacional atento tan solo a sus exclusivos intereses, libre del analfabetismo, la incultura y la falta de preparación que nos impide pensar de manera autónoma y pensar como quería Martí, pensar en grande, en la historia común de Nuestra América y en la necesidad de mirar no hacia el norte sino hacia el sur, no hacia la derecha, sino como dicen los hermanos zapatistas, hacia abajo y a la izquierda.

Cecilia Zamudio / Rebelión

Varios policías se llevan a una adolescente y la violan. No es la primera vez que pasa algo similar. El feminicidio(1) avanza moliendo vidas, por todo el planeta: el feminicidio se incrementa al amparo de un sistema, el capitalismo, que promueve misoginia a través de su industria de alienación cultural; un sistema en el que los medios de comunicación están en manos de un puñado.

La clase explotadora usa los medios para alienar a la clase explotada, inyectando machismo y racismo porque son paradigmas de sumisión y explotación, de división de la clase explotada.

El feminicidio galopa desenfrenado al amparo de un sistema, el capitalismo, profundamente patriarcal, racista y clasista, que banaliza la explotación y la tortura porque sobre ellas se yerguen fortunas, galopa en un sistema que produce violadores a granel.

Millones de niños son hoy educados en la misoginia, en el porno y la banalización de la injusticia y la crueldad, marinados en machismo y bombardeados por la industria de alienación masiva (televisión, cine, publicidad, video juegos, productos de la industria musical profundamente misóginos, etc.): una educación que lesiona la capacidad de empatía y genera violadores en masa.

El feminicidio galopa en un sistema, el capitalismo, en el que las mujeres son utilizadas como “chivos expiatorios” de toda la rabia que genera un sistema de explotación, por su carácter injusto y maltratador.

La clase explotadora promueve misoginia, racismo, xenofobia, banalización de la tortura, para desviar la rabia de las y los explotados, para que esa rabia nunca llegue contra los grandes capitalistas, que son quienes explotan a las y los trabajadores y saquean el planeta hasta la médula, que esa rabia se quede estallando entre la misma clase explotada pulverizada, desmembrando vidas, comunidades y toda posibilidad de organización para subvertir este abyecto sistema de explotaciones concatenadas.

El feminicidio galopa en un sistema, el capitalismo, en el que el aparato judicial beneficia siempre a la clase explotadora y a sus matones, dejando en impunidad a los ladrones de cuello blanco mientras se ceba contra quien roba un pan, dejando en impunidad a los banqueros que desahucian familias enteras mientras encarcela a quien busca un techo, dejando en impunidad a las multinacionales que saquean montañas y ríos, mientras encarcela durante décadas a las y los campesinos e indígenas en lucha.

El feminicidio galopa en un sistema, el capitalismo, cuyo aparato judicial deja en impunidad total o parcial a los violadores de mujeres y niñas (en total impunidad o con penas ínfimas por violar y destruir vidas). El feminicidio galopa cuando los militares, los policías y demás encargados de reprimir a los pueblos y salvaguardar al Capital, son cobijados de impunidad por las violaciones que cometen...

A los capataces del capital se les paga también con prebendas que incluyen impunidad por las torturas cometidas. Los policías violadores resultan en la mayoría de los casos impunes. Los militares gozan también de impunidad. Los militares estadounidenses gozan de total inmunidad en ciertos países, cuyos gobiernos títeres han firmado convenios que los eximen de ser perseguidos por las violaciones sexuales que cometan (por ejemplo, el gobierno colombiano firmó un convenio que les otorga inmunidad a los militares estadounidenses, incluso por violaciones sexuales. Hay decenas de niñas que fueron llevadas a bases militares y violadas, que han sido incluso filmadas, que no obtendrán “justicia” alguna en virtud de este convenio).

En México las mujeres dicen ¡BASTA!

Las mujeres toman las calles hastiadas del feminicidio; y los medios de alienación titulan que “las mujeres son violentas y destruyen monumentos”, pero guardan silencio sobre la impunidad casi absoluta que desde siempre y estructuralmente cobija a las fuerzas represivas, incluso en casos de violaciones sexuales, torturas y desaparición forzada...

A la clase explotadora, propietaria de los medios de comunicación, le parece más “violenta” una pintada callejera que la violencia cotidiana y brutal contra las mujeres, o que la violencia impune ejercida por los aparatos represivos contra la población. A los medios, propiedad de la burguesía, siempre les parecerá más violenta la persona que protesta contra la injusticia, que la injusticia en sí, porque de un sistema profundamente injusto sacan sus privilegios.

Varios policías se llevan a una adolescente y la violan. Otro policía viola a una adolescente en un baño de un museo. En México, cada 18 segundos violan a una mujer, y cada día 9 mujeres son asesinadas por violencia machista.

En el mundo se estiman en no menos de 6 feminicidios cada hora en el ámbito familiar (asesinatos perpetrados predominantemente por la pareja o expareja) sin contar los feminicidios que ocurren fuera del ámbito familiar. El 60 % de las 87.000 mujeres que fueron asesinadas en 2017 en todo el mundo fueron víctimas de un crimen machista cuyo perpetrador fue su expareja o un familiar, según denuncia un informe de Naciones Unidas (2).

El informe arroja que 15 millones de muchachas adolescentes (de entre 15 y 19 años) de todo el mundo han sido obligadas a relaciones sexuales forzadas en algún momento de sus vidas. Según los datos recogidos en 30 países, solamente el 1 por ciento de ellas ha buscado ayuda profesional.

Las cifras de violaciones intrafamiliares o extrafamiliares son elevadísimas, y aún así, no reflejan sino una pálida punta del iceberg de una realidad brutal. El empobrecimiento por saqueo capitalista aboca a la aberrante explotación de la prostitución a las mujeres más empobrecidas de la clase explotada mundial (coacción económica). La cifras de la Trata (tráfico de seres humanos y prostitución con coacción violenta), arrojan que los proxenetas capitalizan más de 32 millones de dólares al año: más de 4 millones de mujeres y niñas víctimas, en su inmensa mayoría mujeres de la clase explotada (cifras en aumento).

El feminicidio es una realidad tangible, que cabalga al amparo de un sistema que promueve incesantemente misoginia a través de su aparato cultural, que cabalga en un sistema de explotaciones concatenadas.

Las mujeres toman las calles hastiadas de tanta barbarie, del feminicidio galopando, de la impunidad que cobija a los policías violadores, de las injusticias y agresiones cotidianas y continuadas que padecemos las mujeres bajo este sistema criminal que promueve misoginia y feminicidio.

Notas:

(1) Feminicidio no es únicamente el homicidio contra una mujer por violencia machista; en un sentido integral el feminicidio es también el asesinato del derecho a la integridad, las violaciones sexuales y todas las violencias ejercidas contra las mujeres. El feminicidio como realidad social se compone de todo el ámbito de la barbarie misógina y crece de manera dramática en el capitalismo.

(2) Ending violence against women, facts and figures, UN WOMEN, 2018

Blog de la autora: www.cecilia-zamudio. blogspot.com

Presentación

Capital depredador y rebelión* es la recopilación selecta de los artículos de José Uriel Aréchiga Viramontes (1936-2017), firmados como Pepe, a lo largo de 10 años en una columna editorial mensual del periódico El Zenzontle, periodismo de más de 400 voces.

(Por Soldepaz Pachakuti)

Rebelión, 25 de junio de 2019.- El 28-J es el día del orgullo. Como otras tantas celebraciones su origen es yanqui: represiones y movilizaciones, y respuestas del movimiento LGTBI en el año 1969 en Nueva York. Y desde el año siguiente se celebra para reivindicar Derechos, de la diversidad sexual. El 28-J es también aniversario número DIEZ del Golpe de estado en Honduras.

La represión de ese Golpe, cuyas consecuencias permanecen, se ha llevado por delante a numerosos activistas LGTBI, que en el marco de sus libertades se han opuesto al Golpe propiciado desde USA:280 miembros de la comunidad Lésbico, Gay, Transexual, Bisexual e Intersexual fueron asesinados desde el Golpe de 2009.

Diez años atrás se hizo más conocido el crimen del activista Walter Trochez, asesinado por los escuadrones de la muerte de los militares golpistas.

En Colombia, Andrés Chica, de la organización Cordoberxia, que se mueve cuando puede con varios escoltas armados, fue uno de los antifriones que preparó la visita difícil de la XV delegación asturiana a las comunidades campesinas del Sur de Córdoba este año.

Andrés Chica y su organización denunciaron el asesinato anunciado de María Pilar Hurtado esta semana, delante de su hijo de 9 años, y las implicaciones de políticos locales amigos de Uribe en Tierralta.

Ahora, ayer, Andrés Chica resulta nuevamente amenazado de muerte.

¿Y el gobierno de Duque..? MINTIENDO con descaro en Europa sobre que sí que va a proteger a los líderes sociales, cuyo exterminio se recrudece y aumenta en todas las estadísticas. En Brasil, con la llegada del militar evangélico Bolsonaro, varias diputadas y diputados de significación LGTBI han tenido que salir al exilio por las amenazas recibidas: 

Está muy presente el asesinato de la concejala de Río Marielle Franco, “mujer, negra, LGBT, hija de la favela”, pese a que en Brasil se celebra uno de los más grandes desfiles del Orgullo, precisamente en honor a Marielle.

El 28-J y los días anteriores y posteriores hay varias actividades, institucionales o no, que en el caso de Asturias propicia XEGA para exponernos a la sociedad la necesidad de respetar Derechos, entre ellos el acto legislativo que al parlamentín asturiano “se le olvidó” aprobar en la anterior legislatura.

Cuando los colores de la diversidad, básicamente el arcu la vieya o arco iris, ondeen estos días por nuestras calles y palacios de gobierno, recordemos que hay otros movimientos que sustentan sus Derechos en colores similares o iguales, en banderas coloristas como la wiphala o el arco iris: es el movimiento pacifista, por ejemplo, que reclama el fin de las guerras y su negocio de muerte. Es el movimiento indígena que reafirma sus Derechos y nos propone Respetar a la Madre Tierra.

Y que por los mismos motivos, de avaricia, intolerancia, sectarismo y necronegocios son asesinados en varios lugares del mundo: líderes indígenas, pacifistas, activistas LGTBI. Así que sí, las movilizaciones, como la grandiosa de ayer en Sao Paulo, se convierten también en actos de rebeldía y resistencia frente al neofascismo y la necro política del miedo.