Carlos Rodrigues, Espacio Cultural Mane Garrincha, Sao Paulo Brasil

Gracias hermanos, gracias a todas. Nosotros tenemos muchas ganas de que un encuentro como este (Primer Encuentro de Pueblos Originarios en defensa de la vida del Foro Social Mundial) pueda realmente apuntar para una lucha en común de todos los pueblos. Creo que se coloca hoy más que nunca la importancia de la unidad Latinoamericana para luchar contra el capitalismo y el imperialismo.

Para nosotros en el espacio cultural Mane Garrincha, quevivimos en Sao Paulo, en un espacio urbano, los pueblos originarios de Brasil viven en su gran mayoría en norte de Brasil y nosotros en sudeste, por tanto un poquito lejos. Brasil es muy grande. Cuando en el año 1500 llegaron los portugueses, había más de 5 millones de pueblos originarios y ahora no hay ni un millón. Entonces, lo que pasa es que durante mucho tiempo el pueblo originario quedó aislado de la sociedad, como una cosa exótica, para mirarla de lejos.

Ahora, ¿qué nos ofrece el capitalismo a través de la agro-industria o el agro-negocio?

Cambiar lo que tenía antes el latifundio como una reserva de valor, para así tornar a una realización de valor de la gran industria en el campo y entonces la práctica de los capitalistas en el campo es la destrucción de la naturaleza.

Nosotros estamos mirando esto en Brasil, con el Amazonas. Por ejemplo, está siendo destruida , el cielo de Sao Paulo, el cual está lejos del Amazonas, quedó oscuro de tanto fuego que había en el Amazonas se volvó un cielo oscuro de tanto humo.

Nosotros entendemos que hoy la lucha de los pueblos originarios significa una lucha estratégica de toda la humanidad, porque hacer la defensa de los pueblos originarios es defender su espacio de convivencia y al hacer esta defensa ustedes no sólo están haciendo la defensa de los pueblos originarios sino de toda la humanidad, porque si no, en la medida en la que usted destruye toda la naturaleza usted cambia todo el clima, lo cual estamos mirando actualmente.

Tal es la importancia de construir un proyecto estratégico de defensa de los pueblos originarios con la perspectiva de la unidad de todos los luchadores, de hombres y mujeres, del campo y de la ciudad, para que la propia especie no tenga su muerte, lo que el capitalismo está haciendo es una propuesta de muerte, la pandemia no es otra cosa que deriva de la destrucción de la naturaleza.

Hoy nosotros tenemos el Covid-19, Coronavirus, pero al continuar la destrucción de la naturaleza otras pandemias vendrán, porque cuando el virus que queda en la naturaleza, cuando es quitada la naturaleza de ese virus, tiene que ir al cuerpo de un ser vivo ya sea animal o del ser humano.

Para nosotros, participar de un evento como este, con esta perspectiva de defensa de los pueblos es mas allá, es la defensa de toda la humanidad, pero para esto es necesario destruir el capitalismo, no hay otra forma de comprender la lucha hoy.

La izquierda y las fuerzas progresistas tienen que entender que no es la defensa del orden, porque por ejemplo en Brasil la izquierda brasileña oficial quiere hacer la defensa del orden, la democracia representativa, cuando en realidad lo que se está haciendo necesario es la lucha por superar el capitalismo, si nosotros no tenemos eso claro, no conseguiremos avanzar.

Por ejemplo, en la derecha qué hacen; ellos encaminan líderes evangélicos creyentes para cristianizar a los indígenas, y hacen eso para ganar su alma y su conciencia y para después justificar toda la invasión, porque eso es lo que ocurre en gran escala en todo Brasil, en espacios donde viven los pueblos originarios.

Nosotros tenemos que hacer un proyecto de unidad que pueda unir campo y ciudad contra todo el proceso de destrucción que el capitalismo ofrece a la humanidad.

Palabras de los pueblos brasileiros en Primer Encuentro de Pueblos Originarios en Defensa de la Vida del Foro Social Mundial, 25 de septiembre de 2020.