Por Equipo Digital ELN 20 julio, 2020

El 20 de julio de 1810, Colombia lanzó el Grito de independencia que marcó la ruptura de la dominación del imperio español, pero hoy soporta su peor época de dependencia, promovida por el tercer Gobierno de Uribe, que es incondicional de Estados Unidos.

Este aniversario 210 lo vive Colombia con el Congreso cerrado, Duque gobernando por decreto para favorecer a los banqueros y clanes mafiosos que lo hicieron Presidente; mientras la mayoría del pueblo sufre por el hambre y por el Covid-19; y a quienes se le oponen y protestan les cae la persecución y el exterminio.

Evidencia la ilegitimidad del actual Gobierno, las decisiones increíbles que adopta: mandó a detener a los investigadores que descubrieron el fraude electoral que hizo Presidente a Duque en 2018, en vez de aplicar justicia a los Clanes mafiosos que presionaron y compraron votos para él; expulsó del Ejército al Sargento que denunció la violación de una niña indígena por 8 soldados; y cuando los narco paramilitares del Clan del Golfo asediaban y mataban ex combatientes en Ituango, en vez de perseguir a los bandidos, desterró a los perseguidos para Mutatá.

Centenares de Congresistas, ex Ministros y personalidades en un Manifiesto por la democracia han denunciado la amenaza que representa este Gobierno para Colombia; porque entre más hondo cae en su ilegitimidad, más tiránico se vuelve. Así mismo, el Consejo de Paz reclama al Gobierno su desatención a la Resolución del Consejo de Seguridad de la ONU, que exige hacer un Alto el Fuego que permita enfrentar mejor la pandemia.

Duque no hace un Alto el Fuego porque debe ejecutar las fumigaciones con Glifosato que ordenó Trump y debe desplegar la Brigada SFAB que envió el Pentágono, para escalar aún más la agresión contra Venezuela desde territorio colombiano.

A EEUU no le importa que en Colombia esté en desarrollo un Proceso de Paz, pues para ellos vale más su plan de Guerra; tampoco le importa que Uribe haya convertido al país en una Narcodemocracia, porque ambos se lucran con lo que hacen.

La sabiduría popular enseña que “no hay mal que dure cien años”, porque como dijo Jorge Eliécer Gaitán:

“Cercano está el momento en que veremos si el pueblo manda, si el pueblo ordena, si el pueblo es el pueblo y no una multitud anónima de siervos”.