x Mario Hernández

 

Fragmentos de la entrevista con Renán Vega Cantor, historiador

¿Qué ha significado la pasada jornada nacional de movilización en Colombia, el martes 21, que ha contado con tu Universidad Pedagógica Nacional como uno de los espacios de encuentro?

Colombia es un país que no tiene una tradición de realizar movilizaciones y luchas significativas en los meses de diciembre y enero, es una tradición histórica de décadas, que se ha roto el año pasado y este, puesto que al final del año anterior hubo importantes movilizaciones hasta el 20 de diciembre y ahora ésta un mes después aunque no ha sido tan contundente y masiva como la del año anterior, sobre todo que la del 21 de noviembre y las posteriores. Pero sí es importante, teniendo en cuenta esta tradición, que no suelen haber movilizaciones en este momento del año, pero además hay que agregar el factor de miedo y represión sistemática que se viene dando en el país.

Hay un hecho que seguramente no se conoce fuera de las fronteras colombianas, y es el sistemático asesinato de lo que aquí se llaman líderes sociales, aquellas personas con algún compromiso en sus comunidades, barrios, juntas comunales o algún tipo de asociación. Es un genocidio el que estamos viviendo. En lo que ha corrido del año hay más asesinados que el número de días que han transcurrido. Se están realizando asesinatos diarios de una persona por lo menos en promedio. Es una política de miedo que por supuesto incide en los niveles de movilización.

Y el segundo elemento es la propaganda mediática generando terror y miedo, azuzando a que no se realice ningún tipo de movilización. Se difunden noticias diciendo que las protestas están financiadas por Rusia. Mike Pompeo ha reafirmado aquí en Bogotá denuncias que había hecho la Vicepresidenta del país. Lo cual afirma que seguimos viviendo en el ámbito de la Guerra Fría, como si el mundo no hubiera cambiado, para decir que no hay razones fundamentales para la movilización.[…]

Colombia está inscripta en esa misma lógica, que es la misma de Israel y Medio Oriente. Y aquí la clase dominante se enorgullece en decir que somos el Israel de Sudamérica. Colombia y Bogotá y el Estado colombiano es una punta de lanza del terrorismo de EEUU contra los pueblos latinoamericanos.