(Tercera parte y final)

Finaliza la entrevista a Luis Vargas, representante venezolano de la Juventud obrera cristiana internacional. Un agregadode la misma referido a la milicia popular bolivariana lo publicamos en la revista Comunera 47, enero-febrero de 2020.

La estrategia del enemigo de los pueblos incluye la contrainsurgencia, la guerra, la infiltración, la división e incluso la ideología, ¿en Venezuela cómo se viven estos procesos desde el pueblo?

Luis: Lamentablemente la construcción de una estrategia contra hegemónica o de sobrevivencia no existe ni se está construyendo desde los movimientos sociales, hubo una construcción de la estrategia entre 2006 y 2013 a cargo del comandante Chávez, fue el Plan de la Patria, aunque fue el planteamiento inicial de Chávez, fue un planteamiento que la gente discutió y garantizó, es la cristalización del plan estratégico de cambio real y concreto de la sociedad venezolana de cambio real de la sociedad venezolana.

Luego se le salió el pie del timón: es esa disertación que hizo Chávez con los ministros sobre la gestión pública y la transformación de la gestión pública en una gestión revolucionaria. Pero hoy eso cae en saco roto porque, primero, el gobierno (la toma) de una manera muy discursiva sin desarrollo práctico y, segundo, va cambiando cosas muy importantes, por ejemplo: en 2017 hubo un debate porque unos sectores del partido del gobierno colocaron un elemento del “empresariado revolucionario” y dice “se puede avanzar al socialismo con libre mercado”, estos son sectores fuertes ahora en el gobierno, sectores que capitanea Alejandro Cabello y otro alcalde de Valencia, quienes son gente de los empresarios.

Entonces no hay una respuesta estratégica del campo popular, han estado en construcción las estrategias, pero ese proceso paró por la crisis, y los movimientos se lo han dejado fundamentalmente al Estado.

El gobierno tiene la cabeza de la reconstrucción de Venezuela, hay esfuerzos, pero son muy dispersos de esos movimientos sociales y nada han modificado. En épocas como en 2012, 2011, 2010 había una concentración del campo popular de consenso frente a 100 o más elementos, había un consenso del campo comunitario, campo obrero, campo campesino, ahora esa realidad está un poco resquebrajada, pero yo siento que está en suspensión, yo siento que no hay una última palabra en ese nivel.

Pienso que el movimiento popular venezolano se está readaptando a las nuevas situaciones históricas. Veo que el regreso del movimiento popular revolucionario a partir de la crisis va a ser un regreso con mucha fuerza, porque se está repensando en unas situación que es de crisis de guerra y cuando el movimiento logre encontrar las claves de esto, que creo será a lo mucho unos 5 o 7 años, el movimiento va a dar una respuesta importante en Venezuela.