El pasado 25 de septiembre se llevó a cabo el línea, monitoreado desde México, el Primer Encuentro Virtual del Espacio Temático de Pueblos Originarios del Foro Social Mundial, el cual contó con la participación de representantes de 10 pueblos originarios, además de 4 invitados como comentaristas de reconocimiento internacional. Los temas tratados fueron diversos y de gran importancia no sólo para los pueblos afectados, sino para toda la humanidad, como se reiteró a lo largo del encuentro.

Se inició con un homenaje inmemorian a Heriberto Salas Amac, concejal nahua promotor de la defensa del territorio y de la autodeterminación de los pueblos y miembro del comité facilitador del Espacio temático de Pueblos Originaros del FSM. Después vinieron los testimonios de la destrucción de grandes regiones donde los ecosistemas sustentan la biodiversidad, vital para esas zonas y para el mundo. En la voz de mujeres y hombres se relató con claridad e indignación el avance de proyectos extractivistas auspiciados por gobiernos locales o nacionales. También se mostraron avances y procesos de esperanza sostenidos por estos pueblos, porque la lucha y la organización brindan frutos.

Las denuncias por la destrucción de los ecosistemas, del patrimonio biocultural y de los asesinatos sistemáticos se hicieron patentes en la voz de representantes de los pueblos Zoque de la Selva de los Chimalapas, Ikoots del Istmo de Tehuantepec, estos dos en México; de los pueblos indígenas de Colombia y de la Amazonía donde los asesinatos de activistas y defensores del medio ambiente es una constante en el avance de la destrucción capitalista.

Otras voces además de señalar estos crímenes, indicaron la importancia de la relación entre los pueblos originarios y los ecosistemas en los que se asientan, tal como lo expresaron los miembros del Espacio Autónomo Cultural Mané Garrincha de Brasil: “la defensa de los pueblos originarios es la defensa de la Naturaleza” sentenciaron.

Por su parte los pueblos Nahua de Tixtla, Guerrero, representados por la Brigada de Salud Comunitaria 43, hablaron de la promoción de la salud y la medicina tradicional como una forma de resistencia y autonomía comunitarias; en el mismo sentido, las compañeras de los pueblos Diné Bikeyah y Kikapú en Texas, Estados Unidos hablaron de proyectos de partería tradicional en los territorios de estos pueblos y de las prácticas descolonizantes mediante la sanación de los cuerpos y los espíritus con medicina tradicional, la comida y la recuperación de la cultura propia.

A su vez, el representante del pueblo Kichwa Saracayú, con su atuendo tradicional y con actitud digna animó a los presentes en este encuentro virtual a no decaer los ánimos, porque la práctica de la cultura propia fortalece el espíritu. Un ejemplo de ello es la relación entre los sistemas alimenticios propios y la sanación de los cuerpos: “la comida es la medicina de los pueblos”.

Muy esperanzadora fue la participación de la joven representante del Pueblo Kurdo, quien es miembro de las milicias femeninas y manifestó la fuerza de su pueblo, que se articula en un confederalismo democrático que atraviesa las fronteras y alcanza un total de 45 millones de personas, mostrando un ejemplo de ejercicio del poder popular sin partidos ni caudillos.

Desde la Asamblea Mundial por la Amazonía se evidenció del valor supremo que tiene la selva amazónica, reflejado en bienes como los miles de millones de litros de agua que genera diariamente, y que no se pueden cuantifican en términos monetarios, pero que se ve destruida por los proyectos capitalistas que la devastan constantemente.

Desde Colombia llegó el saludo de la Organización Nacional Indígena de Colombia, ONIC, que narró la disputa contra un régimen autoritario que asesina y encarcela a sus luchadorxs sociales y políticos. Este año suman 60 masacres y en las últimas semanas casi 20 civiles desarmados que ejercían su derecho legítimo a la protesta, han sido asesinados por fuerzas policiales y paramilitares. A pesar de ello siguen con sus planes de vida y experimentan sus alternativas de convivencia, resistiendo a la pandemia y al régimen de muerte que gobierna.

Los invitados centraron sus comentarios en las denuncias expresando que el capitalismo no tiene un rostro amable, que el racismo como construcción ideológica se filtra aún en los discursos científicos de occidente y en la práctica “extractivista” de los intelectuales al servicio del sistema y sus corporaciones transnacionales, que los capitales con nombre y apellido avanzan sobre el continente, y que hay un proceso de recolonización que se cierne sobre los pueblos originarios por lo que se debe tejer la articulación de los pueblos. Al final del encuentro, l@s participantes expresaron el optimismo y la alegría por este ejercicio de diálogo, reflejando un espíritu de lucha y combate ante los proyectos de muerte que se ciernen sobre la Madre Tierra, reforzando sus luchas cotidianas. Oscar Ochoa